La esferodinamia combate el dolor crónico

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El origen de este método surge con Klein Vogelbach, quien fue la primera en utilizar la pelota en el tratamiento de adultos con problemas ortopédicos. En Estados Unidos, ésta pelota grande de vinilo fue llamada “Suiza”, ya que varios terapeutas americanos la vieron utilizarse con propósitos terapéuticos en las clínicas de dicho país. A partir de los años 80´s esta técnica amplió su panorama y trató a pacientes neurológicos, con el objetivo de aumentar el movimiento. Su inestable base del soporte, requiere continuos ajustes posturales para mantener el balance y el equilibrio, para desencadenar procesos cerebrales de aprendizaje y memoria que involucran la plasticidad sináptica. La Esferodinamia ayuda al aumento de fuerza y movilidad articular, desarrollo de la motricidad, equilibrio y coordinación, así como la mejoría postural. Se pueden ampliar rutinas del movimiento con posibilidades de sostener el cuerpo en el espacio, con base en un sistema-modelo de control motor y aprendizaje motor, los cuales requieren estrategias cognitivo- conductuales que han resultado ser útiles para el manejo del dolor crónico. Al ser indispensable el movimiento para el aprendizaje y el pensamiento, se requiere de un mayor conocimiento sobre lo que activa las capacidades mentales al incrementar el número de conexiones neuronales en el cerebro. Ante este panorama el neurorehabilitador deberá enriquecerse con esta propuesta rehabilitadora para el manejo del dolor crónico y adentrarse en investigaciones que profundicen y le den valía a esta técnica.